Greta Thunberg, cuando sólo tenía 16 años en 2018, desde un país del primer mundo como es Suecia, pasó súbitamente de ser una persona perdida en el anonimato masivo a ser ampliamente conocida, de una protesta solitaria frente al parlamento sueco a encabezar un movimiento global de jóvenes para luchar contra el calentamiento del planeta.
¿Cómo era Thunberg? Externamente, vimos a una adolescente de 16 años que lucía todavía más joven, con su rostro redondo, piel blanca, ojos claros, cabellos rubios oscuros que peinaba con raya en medio y una larga trenza. Internamente introvertida, pero no tímida, de pocas palabras, pero a la vez, asertiva y fluida cuando se trata de hablar a favor de Gaia (La Tierra) que ha estado sufriendo por tener fiebre.. Admitió que se inspiró en la activista por los derechos de los afroamericanos, Rosa Parks; con ella entendió que, una persona, con su esfuerzo, puede marcar la diferencia.
Thunberg se dio cuenta que el aleteo de una mariposa puede modificar todo el clima, es decir, toda una situación. Greta dijo: “Nosotros -los introvertidos- podemos hacer que nuestras voces sean escuchadas”, (revista Rolling Stone, marzo 2019).
EL ACUERDO DE PARIS ESTABLECE MEDIDAS PARA LA REDUCCIÓN DE LAS EMISIONES DE GASES CONTAMINANTES
Una toma de conciencia paulatina la llevó a una activismo a favor del equilibrio ecológico del planeta. Al ser estudiante, con tan sólo once años de edad, le enseñaron sobre el cambio climático y la destrucción del medioambiente. Esta problemática le afectó a tal grado que llegó a tener una fuerte depresión por la situación tan adversa de la tierra. Dejó de comer, se sintió sola y desamparada
-según reveló su padre Svante Thunberg-. Además, se enteró que el gobierno sueco no se comprometía a cumplir lo pactado en el Acuerdo de París sobre el cambio climático en 2015. Entonces reflexionó : ¿De qué sirve estudiar para el futuro si ese futuro parece que no va a ser? Una crisis global la llevó a una crisis personal. Greta, les anunció a sus padres su intención de hacer una huelga en protesta contra la falta de acción ante el calentamiento global. Así comenzaron sus viernes de protesta frente al Riksdag, el Parlamento sueco, la huelga duró tres semanas. Poco a poco su inconformidad se fue dando a conocer, sobre todo a través de las redes sociales. Sus padres la apoyaron y muchas otras personas se sumaron a la defensa y cuidado del planeta. La protesta pasó de un sólo país; Suecia, a muchos países; primero, el TedTalk sirvió como plataforma, luego, en Katowice, Polonia, más tarde en la cumbre del clima de Naciones Unidas, posteriormente, en 2019 dio discursos en Davos y en Bruselas; continuó en el Foro de Economía donde criticó a los ejecutivos que viajaron en sus aviones privados, (parafraseando a la sueca): creo que es un poco de hipocresía viajar en jet privados a un lugar donde van a hablar sobre la crisis del clima. El 15 de marzo, Greta estuvo al frente de la huelga mundial por el cambio climático. Tras su paso por la sede de la Unión Europea, unos 12 mil adolescentes se congregaron en Berlín para pedir medidas contundentes contra el cambio climático. La capital alemana es sólo una de las 270 ciudades en donde han tenido lugar estar marchas los días viernes.
Se dice que la activista trata de llevar una vida normal cuando no está militando. Va a la escuela, hace sus tareas, pasea con sus perros, se alimenta como vegana. Entre el activismo ecológico y la vida sencilla, Greta es una de las grandes personalidades del movimiento ecologista.
